EL SOSPECHOSO DE LA DESAPARICIÓN DE MARTA CALVO CONFIESA QUE LA DESCUARTIZÓ Y SE DESHIZO DEL CADÁVER.
El principal sospecho del caso de la desaparición de Marta Calvo, Jorge Ignacio P,J,, ha sido detenido tras entregarse como autor del crimen esta mañana a la Guardia Civil en el cuartel de Carcaixent (Valencia), donde ha confesado que para deshacerse del cadáver la descuartizó y arrojó a diferentes contenedores.
La investigación se inició a principios de noviembre, cuando la madre de la víctima alertó a la policía de la desaparición de la chica tras quedar con un hombre el cual había conocido a través de la una aplicación del móvil para conocer a gente. La madre pudo acudir al domicilio del sospechoso ya que Marta Calvo le había facilitado la ubicación, aunque finalmente puso la denuncia al no obtener respuestas.
A pesar de que el detenido trató de huir, limpiando su casa e intentar deshacerse de su coche a través de un amigo, se ha entregado al ser convencido por su familia. Los Agentes del Grupo de Homicidios de la Comandancia de Valencia y de la Unidad Central Operativa (UCO) se han encargado de interrogarlo para intentar descubrir el paradero de la valenciana y poder poner fin al caso. Juan Carlos Fulgencio (delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana) ha asegurado que la hipótesis inicial era que Marta podría haber sufrido una agresión violenta que posiblemente le hizo perder la vida.
No es la primera vez que el detenido ha tenido problemas con las autoridades. Fue perseguido por la Guardia Civil por conducción temeraria y ha estado en la cárcel por ser encontrado en Italia con 9 kilogramos de cocaína. Además, fue investigado por la muerte de otra mujer en Valencia con la cual también puede estar relacionado. Esto se debe a que fue el último cliente de una prostituta valenciana que falleció días más tarde por haber sufrido convulsiones y desmayarse tras ser visitada por el colombiano. Respecto a las sospechas con la desaparición de otra chica a 10 kilómetros del lugar donde sucedió la tragedia de Marta, Fulgencio ha afirmado que ambos casos no tienen relación.
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